Hamburgo quiere dar ejemplo en sostenibilidad medioambiental, y las autoridades locales han aprobado un documento, la «Guía para aprovisionamiento verde», que prohíbe a todos los servicios públicos de la ciudad alemana comprar ciertos productos y componentes contaminantes con dinero de los contribuyentes.
El documento prohíbe específicamente la compra con dinero público de cápsulas de café, agua y otras bebidas en botellas de plástico, y platos y utensilios desechables, así como de artículos de higiene como detergentes con cloro y ambientadores contaminantes. Sobre las cápsulas de café, el documento afirma que las cápsulas «no pueden reciclarse fácilmente debido a que suelen fabricar con una mezcla de plástico y aluminio.