A escasos tres días del esperado encuentro climático, no dejan de sorprendernos las diversas estrategias que están adoptando los diferentes líderes políticos, músicos, actores… para focalizar nuestra atención en el evento. Si hace unos días era Greenpeace quien lanzaba una provocadora campaña, que apelaba al sentimiento de culpa que podrían llegar a sentir nuestros líderes políticos, ante una posible no actuación frente al cambio climático.
Hoy, ha sido el turno del polifacético y fundador de los Beatles, Paul McCartney, que ha aprovechado su visita al Parlamento para pedir a la ciudadanía europea un recorte, moderado, en la ingesta de productos cárnicos con el fin de salvar nuestro planeta. Concretamente, ha propuesto reservar un día a la semana para tal fin como primera medida hacia un consumo sostenible. Y es que, ha acusado directamente a la industria cárnica, de ser uno de los principales causantes del deterioro del planeta, generando entre el 20 y el 30 por ciento total de las emisiones por gases invernadero.
«The livestock industry produces more greenhouse gases than all of transport put together – cars planes trains trucking,» Paul McCartney
Pero no ha estado solo en esta hazaña, como compañero ha tenido al mismísimo Rajendra Pachauri presidente del Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC), y también vegetariano, que no ha dudado en ilustrarnos con la siguiente comparativa «para producir una hamburguesa hay que emplear el agua equivalente a cuatro horas de ducha». Este llamamiento ha sido avalado, también, por el presidente del parlamento Jerzy Buzek.
Aunque resulte ha simple vista una propuesta alocada e incluso para muchos ofensiva, y más viniendo del pais del chuletón, creo que debajo tiene un trasforndo importante que viene a dar un toque de atención a nuestro ilimitado ritmo de consumo.