Tanto Divide como Good Technology son dos startups que desarrollan tecnología en el prometedor y necesario campo del MDM (Mobile Device Management), un campo que engloba una serie de tecnologías y soluciones que buscan resolver la encrucijada del BYOD (Bring Your Own Device; Trae tu propio dispositivo). La tendencia de los trabajadores a utilizar sus propios dispositivos está haciendo temblar a las medianas empresas y grandes corporaciones y, sobre todo, a sus departamentos de IT.
Con la rápida irrupción de avanzados tablets y smartphones en el mercado de consumo controlar la introducción de dispositivos de comunicación personales en el área de trabajo se ha tornado un verdadero reto y esto está dando muchos dolores de cabeza a los responsables de la gestión de IT, que luchan por mantener cierto control sobre sus redes y no poner en peligro sus estándares de seguridad, compatibilidad y fiabilidad.La utilización de aplicaciones personales junto con el creciente uso de aplicaciones en la nube no hace más que acrecentar el reto.
«Los de IT pueden hacer lo que les plazca… yo seguiré usando Dropbox, Gmail y Whatsapp para trabajar» parecemos pensar todos.Pero, ¿qué consecuencias a nivel de seguridad, privacidad y accesibilidad pueden tener el uso de estas herramientas en la oficina? Para resolver este problema están surgiendo empresas como Divide o Good Technology que desarrollan aplicaciones que logran mantener cierto orden en el espacio de trabajo. Este mercado, denominado MDM, llegará a los 1,600 millones de dólares en 2014 según estimaciones de Gartner.
La competencia ya es dura en un área que tampoco quieren dejar escapar algunos de los fabricantes de sistemas IT más consolidados como Citrix oVMWare entre otros. Sin embargo, la apuesta de las startups también empieza a ser importante. Divide acaba de lograr una ronda de financiación de 12 millones de dólares por parte de Google Ventures y Good Technology consiguió 50 M$ en Abril en su camino hacia la bolsa. Sin duda alguna vamos a ver como este mercado se irá consolidando durante los próximos años y muchos de los grandes fabricantes de software realizan grandes adquisiciones. ¿Hay todavía hueco para startups europeas? El nimio sector europeo del software podría aprovechar alguna oportunidad de crecimiento en este emergente campo.