Deusto se engancha a la industria 4.0

El pasado 27 de marzo se puso la primera piedra del laboratorio de fabricación digital Deusto FabLab promovido por la Universidad de Deusto y la Diputación de Bizkaia para potenciar la creatividad, la innovación y el diseño en el desarrollo de nuevos productos, servicios y experiencias.

DeustoFabLab es un espacio multidisciplinar abierto a la sociedad y perteneciente a la red mundial liderada por el MIT –Massachusetts Institute of Technology–,  un nexo para miles de investigadores de nuevos modelos de producción a todos los niveles del diseño, la arquitectura y la ingeniería. La Universidad de Deusto realiza de esta forma su propia aportación al proceso de transformación de la economía vasca hacia la industria 4.0.

Los Fab labs son unos espacios de experimentación en el campo de la producción que se integran dentro de los contextos locales donde se sitúan. Por lo tanto, existe una gran diversidad entre los objetivos, proyectos y realizaciones, modelos de negocio y articulaciones locales según cada Fab lab. Algunos se dirigen explícitamente a artistas y cruzan la fabricación digital a las experiencias y ambientes de los hackerspaces, cuando otros se orientan a la solución de problemas sociales y de salud; algunos se financian de forma pública, otros buscan los modelos de negocios que les sostendrán. Los proyectos que han sido desarrollados en los Fab labs incluyen turbinas solares e hidráulicas, ordenadores y redes de datos wireless (cliente ligero), instrumentos de análisis para la agricultura y la salud, casas personalizadas, máquinas de prototipado rápido y muchos otros.

El concepto de Fab lab aparece al principio de los años 2000 en el Center for Bits and Atoms (CBA) del Massachussets Institute of Technology (MIT) cuyo director era ya en esa épocaNeil Gershenfeld. Nace de una colaboración, en el seno del Media Lab del MIT, entre el Grassroots Invention Group y el CBA, cuyas investigaciones giran en torno a la relación entre el contenido de la información y su representación física y al empoderamiento de las comunidades gracias a una tecnología de base. En el marco del desarrollo de sus investigaciones, el CBA recibe una financiació

Misión. Los FabLabs son una red global de laboratorios locales que permiten acceso a equipamiento de fabricación digital fomentando la creación.n del National Science Foundation (NSF) para adquirir máquinas capaces de “construirlo casi todo”.¹ El Fab lab nace como una manera de justificar esa financiación, “haciendo lo que se hacía en el MIT, en lugar de solamente hablar de ello”.² En 2002, emergen los primeros Fab labs en India, Costa Rica, Noruega, Boston y Ghana, siendo una unidad de producción a escala local.

Equipamiento actual.

• Máquina de corte por láser CO2 para estructuras de 2D y 3D, grabación y/o corte materiales; una máquina de corte de vinilos para señalética, personalización textil, corte de láminas de cobre para antenas y circuitos flexibles;
• Fresadora de alta precisión para placas de circuito impreso y piezas de precisión; una fresadora de grandes dimensiones para mobiliario y cubrimientos;
• Impresoras 3D para prototipado rápido de casi cualquier cosa y una amplia gama de componentes electrónicos y de programación para un prototipado rápido de circuitos electrónicos.

Acceso. Los FabLabs disponen de máquinas de fabricación digital capaces de fabricar casi cualquier cosa, cosa que no dañe a nadie.

Educación. La asistencia operacional, educacional y técnica en los FabLabs es personalizada y profesional.

Usuarios. Abierto a estudiantes, a la comunidad universitaria y al público en general, mientras que se respecten el Fab Charter.

Responsabilidades.

• Seguridad – saber trabajar con los equipos sin hacer daño a la gente o a las máquinas.
• Operaciones – ayudar con la limpieza, mantenimiento y mejora del laboratorio.
• Conocimiento – aportar la documentación, los ficheros y las instrucciones de cada proyecto desarrollado.

Derechos de autor. Los diseños y los procesos desarrollados en el FabLab deben mantenerse disponibles para uso de personas individuales, aunque la propiedad intelectual puede ser protegida o vendida por su desarrollador.

Negocios. Se pueden desarrollar actividades comerciales dentro de un FabLab, pero estas actividades no deben entrar en conflicto con los otros usuarios, ni con los procesos de desarrollo, ni con el horario de accesibilidad.

Origen. Los FabLabs nacieron como un proyecto de difusión del MIT en Boston en 2004. Desde entonces se han abierto cientos de FabLabs alrededor del mundo, formando el red mundial de FabLabs, llamado Fab Network. A día de hoy, la red mundial de Fab Network está compuesta por más de 400 laboratorios individuales locales conectados globalmente.